23 de septiembre de 2011

Bacalao con ajo y tomate

Una receta fácil de hacer ya que el bacalao puede ser congelado y quién no tiene un poco de aceite, ajo y tomate frito en la despensa...



 INGREDIENTES
  • Lomos de bacalao desalado
  • Ajo
  • Harina de trigo
  • Tomate frito
  • Aceite de oliva virgen extra
No pongo cantidades en esta receta pues podemos variarlas según queramos. Más o menos aceite o ajo, al gusto. Más o menos tomate, según queramos el resultado más o menos seco. En cuanto se hace la receta unas 200 ó 300 veces se le coge el punto.

Ponemos dos o tres cucharadas de aceite en una sartén y cuando este caliente, no hirviendo, añadimos los dientes de ajo para que se vayan haciendo durante unos minutos, cuidando de que no se tuesten y los reservamos. Con esta maniobra hemos conseguido que el aceite coja un poco el sabor del ajo.

Pasamos los lomos de bacalao por harina y los pasamos por el aceite caliente un par de minutos por cada lado, sin pasarnos de tiempo. El punto es el necesario para que la piel salga casi sola. Y eso es lo que hacemos, vamos separando la piel de los lomos y reservamos junto con los ajos. Este tiempo de fritura, con la harina y la piel del bacalao, hace que el aceite engorde y tome una consistencia más gelatinosa.

Ahora es el momento de deshacer los lomos con cuidado para retirar las espinas que puedan quedar y ponerlos de nuevo, junto con los ajos, en la sartén, con el mismo aceite que teníamos. Con la ayuda de una cuchara de madera vamos deshaciendo los trozos mientras se hacen, durante unos cinco o seis minutos. Añadimos el tomate frito y dejamos a fuego medio-bajo durante unos minutos más.

He montado el plato como si de una tapa se tratara, acompañando de una rebanada de pan frito. Como decoración unas hierbas provenzales.


16 de septiembre de 2011

Batido de Kiwi


Ahora que está a punto de terminar el verano, pero aún nos quedan días de calor, traigo esta idea para un refrescante batido-granizado de kiwi. La elaboración es más que fácil.

Los ingredientes, por persona, son: 1 kiwi amarillo, 1 yogur natural cremoso (mejor si es desnatado) y dos cubitos de hielo.

Se pone todo en una batidora que esté preparada para picar hielo, no vaya a ser que escaharremos el aparato, y le damos unas cuantas revoluciones hasta que todo quede bien picadito.

Se sirve en una copa bien bonita, como la de la foto, y a disfrutar.

Este batido se puede hacer de fresa, de manzana, de sandia ... y variar la proporción de hielo para darle un aspecto más granizado.

2 de septiembre de 2011

Trufas de chocolate

El árbol del cacao tiene como nombre científico Theobroma cacao. Theobroma, en griego, significa "alimento de los dioses". Hernán Cortes trajo el chocolate de América en el siglo XVI, aunque ya Colón tuvo conocimiento de él. En un principio era degustado tan sólo por las clases altas. A finales del siglo XVIII comenzó la producción industrial y su consumo se extendió a todos los públicos. A finales del XIX, los suizos crearon la primera tableta de chocolate con leche e incorporaron un procedimiento de homogeneización que aportaba una gran suavidad al producto.

Parece ser que el chocolate negro, mientras más puro mejor, es una alimento de lo más sano siempre que lo tomemos en cantidades justas, ya que su aporte calórico es grande. Las trufas de chocolate que hoy vamos a hacer tienen el inconveniente de añadir muchas grasas en forma de nata y mantequilla que no son tan saludables, pero que son indispensables para dar ese toque de suavidad. Por tanto degustemos una trufa, dos a lo sumo, y aprovechemos lo bueno del chocolate sin abusar de las grasas.



 INGREDIENTES
  • 250 gr. cobertura de chocolate negro
  • 150 gr. de nata (35% de materia grasa)
  • 40 gr. mantequilla sin sal
  • 1 cda. de azúcar
  • Cacao puro en polvo
  • Fideitos de chocolate
  • Almendra picadita
En primer lugar ponemos a calentar la nata con el azúcar. Cuando esté casi a punto de hervir apagamos el fuego y añadimos la mantequilla hasta que funda. A continuación ponemos la cobertura de chocolate y removemos hasta que se integre bien. Si hiciera falta mantenemos el calor al baño maría.

Dejamos enfriar en el frigorífico durante un par de horas y después formamos un rulo de unos 2 cm de ancho sobre un papel de aluminio, apretando bien para que quede bien compactado. Dejamos en el frigorífico durante un día.

Para formar las trufas cortamos trozos iguales del cilindro de chocolate y, con las manos bien limpias, formamos las bolitas de trufa que pasaremos por cacao en polvo, fideitos de chocolate o almendrita picada. El calor de las manos derrite una capa exterior de la bolita de chocolate que permite que se adhieran mejor los fideitos o la almendra picadita.


Una variante a esta receta consiste en dar sabor al chocolate: por ejemplo a menta. Para ello lo que haríamos es dejar infusionar en la nata caliente unas cuantas hojas de menta (unos 10 gr. es suficiente) durante 8-10 minutos, antes de añadir la mantequilla y el chocolate. Y no olvidar eliminar las hojas utilizando un colador.


Asimismo es posible, a la hora de formar las trufas, introducir en el interior un fruto seco: avellana, nuez, pistacho, ... las posibilidades son muchas.