15 de junio de 2012

Donuts de andar por casa

Existen en la red algunas recetas para preparar donutos caseros y os recomiendo la página de www.pequerecetas.com que viene con un video muy bien explicado. He seguido la receta casí al pie de la letra con solo unos cambios en la parte final y han salido unos donuts muy aceptables.



 INGREDIENTES
  • 500 gr de harina de fuerza
  • 25 gr de levadura de panadero
  • 80 gr de azúcar
  • 5 gr de sal
  • 250 cl de leche
  • 1 huevo
  • 40 gr de mantequilla
  • Ralladura de una naranja
  • 2-3 semillas de cardamomo
  • Aceite de girasol para freír
  • 2 cuharadas de azúcar glass 
  • 2 cucharadas de mantequilla
Lo primero es preparar la masa.
  1. Para ello podemos en un bol grande la harina, el azúcar y la levadura y mezclamos muy bien.
  2. Ponemos la sal, la ralladura de la naranja y las semillas de cardamomo en un  mortero o almirez y machacamos bien. Añadimos al bol con la harina y seguimos mezclando
  3. Añadimos la leche y el huevo y vuelta a mezclar hasta que veamos que la masa se separa de las paredes del recipiente. Para ello es posible que tengamos que añadir un poco más de harina.
  4. Se pone la mezcla en la mesa de trabajo, bien limpita, y nos dedicamos a amasar con las manos durante un buen rato, unos 10 minutos.
  5. Añadimos la mantequilla en pomada y se vuelve a amasar. En este punto la mezcla se vuelve un poco pegajosa y es posible que haya que añadir un pelín más de harina
Dejamos ahora reposar la masa en ambiente calido, tapada con un trapo limpio, durante al menos una hora y vemos que la masa dobla su volumen.

Para formar los donuts lo que hacemos es estirar la masa formado una plancha de aproximadamente 1 centímetro de grosor y, ayudándonos de dos moldes redondos de diferente diámetro, vamos formando los donuts. Aprovechamos los recortes para formar más roscos.

Hay que volver a tapar los roscos y dejar reposar durante una hora más. Vemos que al final de esta nueva fermentación los roscos aumentan su volumen al doble.

Y llega el momento de freír en abundante aceite de girasol, para que no dé sabor como haría el aceite de oliva. Vuelta y vuelta, procurando que no se queden crudos pero tampoco se arrebaten. El aceite a fuego medio. Es cuestión de probar...

Para endulzar los roscos se prepara un topping con partes iguales de mantequilla, azúcar glass y agua y se pintan los roscos con esta glasa y un pincel de silicona cuando aún estan calientes.

Pero yo recomendaría un método más eficiente. Se prepara una cantidad mayor de glasa y se pone a calentar en un cacito y conforme vamos sacando los roscos de la sartén, bien escurridos, los vamos mojando en la mezcla de azúcar, mantequilla y agua para que vayan empapando.

Otra posibilidad es decorarlos con una cobertura de chocolate...


8 de junio de 2012

Crema de calabacín fría

Para combatir el calor, esta cremita de calabacín es muy refrescante y nutritiva, a la vez que ligera. Muy recomendable para estas temperaturas.



 INGREDIENTES
  • 4 calabacines
  • 2 cebolletas medianas
  • 8-10 cucharadas aceite oliva virgen
  • 1 litro de caldo de verdura
  • 50 gr. de mantequilla
  • 1 cucharada de harina.
  • 4-6 quesitos
  • Perejil para decorar
En primer lugar picamos las cebolletas lo más finitas que podamos. En una cacerola suficientemente grande echamos el aceite de oliva y ponemos a fuego medio-bajo. Añadimos la cebolleta picada y dejamos que se vaya haciendo durante unos quince minutos. Se trata de que se haga, sin dorarse, para obtener ese sabor dulce tan característico. Removemos de vez en cuando.

Mientras tanto pelamos los calabacines y cortamos en cuadraditos de unos 4-5 milimetros y añadimos cuando hayan pasado los quince minutos de cocción de la cebolla. Subimos el fuego un par de puntos y dejamos unos 10 minutos removiendo a menudo y con cuidado de que no se arrebate el calabacín.

Pasado ese tiempo añadimos la mantequilla y la cucharada de harina y removemos bien durante 2-3 minutos para que la harina se tueste un poco. En este punto, la mezcla es algo así como pastosa, pero por poco tiempo ya que es el momento de echar el caldo. La cantidad depende del tamaño de los calabacines utilizados y de la densidad que queramos aportar a la crema. Si ponemos mucho caldo obtenemos una sopa; con menos caldo, una crema. Yo he utilizado unos 750 cc de caldo, tres cuartos de litro.

Deberemos tener cociendo unos 10 minutos. El tema del condimento puede ser en cualquier momento. A mi me gusta echar un poco de sal y pimienta justo antes de añadir el caldo y rectificar al final.

El caldo lo podemos preparar nosotros o, para salir del apuro, utilizar uno de los preparados que se encuentran en los comercios. También podemos utilizar la tan socorrida pastillita de concentrado. Asimismo podemos utilizar un caldo de ave, el lugar de verduras.

Cuando ha terminado de hervir añadimos los quesitos o cualquier queso cremoso que tengamos a mano y le metemos un buen meneo con la batidora para que quede una textura muy fina. En principio no hace falta pasar por el chino ya que el calabacín lo hemos pelado y con el tiempo de cocción ha quedado muy desecho.

Dejamos atemperar la crema y la enfríamos durante unas cuantas horas en la nevera. A la hora de servir decoramos con un chorrito de aceite de oliva y un poco de perejil picadito o albahaca, al gusto.